Alberto, Curro y yo hemos estado en Copenhague .
Al volver a nuestro pueblo, yo echaba de menos los árboles , la naturaleza tan verde, las personas en bicicleta, el pan de los desayunos etc
En Copenhague hay mucho ajetreo de coches y bicis pero en otras ciudades más pequeñas no.
Nos dimos cuenta que los habitantes de Dinamarca aman y respetan la naturaleza.Que madrugan mucho y que son muy laboriosos y habilidosos.
Vimos a los niños de 10 años en adelante ir solos a la escuela en bicicleta , por su carril bici , a las 7 de la mañana .
Los niños y jovenes habían comenzado las clases pero se les veía pasear por la ciudad en fila de dos en dos los de secundaria y primaria ; en unos carritos de tres o cuatro los de guarderia .
Casi no vimos policia , pero está .
El campo está muy cuidado y muchos habitantes demuestran tener una gran pasión por las flores y plantas al igual que por los animales .
También nosotros en los lugares cerrados hablabamos en un tono más bajo quizás para no llamar la atención .